Con aquella mirada y aquella sonrisa mi corazón latió lento y rápido a la vez, el tiempo se paro, y el mundo dio vueltas en el lado contrario, esa noche se convirtió en un soleado día, y tu sonrisa me hizo paralizar todo mi cuerpo, no sabía qué hacer para disimular, pero no conseguía parar de mirarte, entonces me di cuenta, estaba enamorada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario